77 fueron los votos de rechazo contra el supuesto intento o plan de terminar con la vida del Primer Mandatario ecuatoriano, que además coarta toda clase de democracia, con los que aprovaron la moción presentada por el asambleísta independiente Rafael Estévez, quien enérgicamente rechazó los planes de varios colombianos y ecuatorianos invilucrados en este hecho.
"Es un magnicidio que no se puede permitir, y las autoridades tienen que investigar este acontecimiento a profundidad ya que es un atentado a la soberanía del Estado" dijo Estévez.
Estévez recoge esta información a través de diferentes medios de comunicación que en sus titulares resaltan los acontecimientos de que autoridades ecuatorianas apreendieron a colombianos, al parecer paramilitares de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), y un ecuatoriano el jueves 12 de junio de 2008 en Quito, bajo la acusación de planear un atentado en contra del Presidente del Ecuador, Rafael Correa.
“En el Ecuador, no se puede permitir que sucedan magnicidios como el caso de Jaime Roldós Aguilera, que fue un asesinato que se mantiene en la impunidad. Si ya tenemos un antecedente en Latinoamérica, en el caso Torrijos; en el Ecuador, con el caso de Jaime Roldós Aguilera, no quiero que en el país ocurran atentados contra un Jefe de Estado, elegido por el pueblo en las urnas” expresó Estévez.
Además insistió que la democracia está en peligro y es obligación del pueblo salir a defenderla, inclusive en las calles. “Hay que defender un régimen constitucional, las cosas en derecho se deshacen conforme se hacen, no queremos que hayan golpistas internos, presuntos magnicidas internos o externos, la Policía Nacional, Inteligencia Militar, el Fiscal General de la Nación, los Ministros Jueces... tienen la obligación de ahondar en la investigación".
De esta manera la Asamblea aprobó el mandato que exige a la Fiscalía, Policía y Fuerzas Armadas, la investigación a profundidad y descubrir a los autores intelectuales, materiales, cómplices y encubridores de tal hecho. Además que se establezca si en este caso se encuentra de por medio algún interés extranjero.
En un punto anterior en la Asanblea Nacional Constituyente otorgo la admistía a los comandos de El Taura, que en el pasado fueron torturados y apresados, incluso borrados, practicamente, de la vidad civil en Ecuador.
La Asamblea Constituyente, mediante 98 votos a favor otorgó la amnistía para las 62 ex comandos de las Fuerzas Armadas del Ecuador que el 16 de enero de 1987 se unieron en la lucha por liberar al general Frank Vargas Pazzos, en el histórico "Taurazo" en la provincia del Guayas contra León Febres Cordero(en su Gobierno).
Al conocer la resolución de la Asamblea los ex-comandos de Taura, que en su llegada, realizaron un solemne acto de disciplina militar y dieron parte de la formación, con los honores respectivos, a su comandante Alfredo Pin; se motivaron y con lagrimas en sus mejillas agradecieron y expresaron que por fin se hizo justicia.
Al conocer la resolución de la Asamblea los ex-comandos de Taura, que en su llegada, realizaron un solemne acto de disciplina militar y dieron parte de la formación, con los honores respectivos, a su comandante Alfredo Pin; se motivaron y con lagrimas en sus mejillas agradecieron y expresaron que por fin se hizo justicia.
A pesar que su líder (Frank Vargas Pazzos) no estuvo presente en el acto, los comandos mostraron respeto y felicidad hacia las causas por las que lucharon y por las que las autoridades de aquel tiempo los persiguieron hasta acabar, practicamente, con su vida social, pero como todo militar siempre han mantenido el pundonor de continuar avantes.
Alfredo Pin explicó que aunque no uniformados y alejados de las filas militares “el uniforme lo llevaron por dentro”. Ofrecieron además sus servicios como soldados en el gobierno de Rafael Correa y aseguraron que estarán listos para defender la patria cuando lo requiera.
Fue la Mesa de Legislación y Fiscalización, la que presentó a la Asamblea Constituyente el informe que dictaminó amnistía a los participantes en el “Taurazo”. Por su parte,Vladimir Vargas, asambleísta por el PRIAN, intervino con un discurso que sintetizó los hechos suscitados en Quito, Manta y Taura, sobre todo lo que aconteció después con quienes respaldaron la iniciativa de Frank Vargas, refiriéndose a su padre, comandante de la Fuerza Aérea de aquel entonces.
“Los comandos de Taura fueron llevados a centros de rehabilitación en todo el país. Se les aplicó torturas de toda índole, no podían darse la vuelta sobre sus camas. Se les golpeó, se les torturó con descargas electricas en sus genitales, incluso a algunos se les dio ley de fuga”, expresó con lagrimas en los ojos el asambleísta.
Dijo que despúes de 20 años, 4 meses y 27 días... es justo que se les otorgue esa admistia que les devuelve sus derechos que les fueron negados por todo este tiempo.
Así mismo Ximena Bohórquez, León Roldós y Félix Alcívar, responsables de la temática en la Mesa No. 10, argumentaron que el "Taurazo" fue un vil acontecimiento político y, que los comandos fueron enjuiciados y sentenciados por un consejo de Guerra Verbal. considerándose de esta manera que los derechos coartados a las 62 personas relacionadas con el levantamiento de Taura deben ser reivindicados para que, luego de 21 años ser incorporen en el servicio pasivo de las Fuerzas Armadas y ejerzan todos los beneficios que les asiste.
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